Acompañado de amigos, familiares, alumnos actuales y antiguos de la Escuela Taurina de Badajoz, el diestro de Almendralejo rememoró su exitosa alternativa en Badajoz lidiando un novillo de Hdros. de Bernardino Píriz con el que demostró que el que tuvo retuvo…
Redacción.-
La plaza de toros de Badajoz volvió a abrir sus puertas por San Juan. A diferencia de años anteriores, en esta ocasión fue para un acto íntimo. Al que solo se pudo asistir con invitación y respetando las medidas de seguridad que demanda la situación que estamos viviendo en estas fechas.
El motivo del evento era homenajear a Luis Reina por su 40 aniversario de alternativa. Fechada en ese mismo ruedo el 24 de junio de 1967. Para la ocasión, se eligió, como no podía ser de otra manera, un novillo de la divisa de Hdros. de Bernardino Píriz, idéntica ganadería a la que lidió en su primera corrida de toros el torero de Almendralejo en este mismo ruedo.
Junto al maestro estuvieron sus alumnos de la escuela quienes también actuaron para deleite de los presentes.
A la finalización del paseíllo llegó la primera de las sorpresas, por la puerta de cuadrillas hicieron acto de presencia un nutrido grupo de ex alumnos que, de esta manera, quisieron acompañar a su maestro de escuela taurina. Después, llegarían los regalos de entidades como el Patronato de Tauromaquia y peñas como la del Conde de la Corte de Jerez de los Caballeros, El Temple de Burguillos del Cerro o la del propio torero en Almendralejo. Asimismo el ayuntamiento de la citada localidad quiso tener un recuerdo con quien ha paseado el nombre de Almendralejo por las ruedos. Nuestro compañeros José María Ballester le hizo también entrega de uno de sus libros de fotografías.
Otros de los momentos más emotivos llegó con el recuerdo a la familia Píriz, tan allegada a la figura de Luis Reina. Una de las nietas entregó un presente en nombre de todos ellos que emocionó especialmente al maestro y a todos los presentes.
Pero lo mejor estaba por llegar, el novillo de Hdros. de Bernardino Píriz dio un excelente juego y Reina, reverdeciendo laureles, le enjaretó una faena artística y vibrante que provocó que los aplausos y olés regresasen, aunque fuese solo por unas horas, a los tendidos de la plaza en espera de que el año próximo pueda abrir sus puertas con normalidad para el disfrute de los aficionados.
GALERÍA GRÁFICA – FOTOS: BALLESTER Y CEDIDAS
