Redacción.-
El balance de las actuaciones de toreros pacenses que han realizado el paseíllo hoy, sábado 9 de octubre, ha sido el siguiente:
FESTIVAL TAURINO:
- Olivenza (Badajoz): Media plaza. Novillos, por este orden, de Luis Terrón, Gavira, Zalduendo, Garcigrande, Núñez del Cuvillo y Hdros. de Bernardino Píriz. El rejoneador Leonardo Hernández, oreja. Espartaco, dos orejas. Víctor Mendes, oreja. El Juli, dos orejas y rabo. Alejandro Talavante, oreja y el novillero Posada de Maravillas, oreja.
Según crónica de Antonio Girol sobre la actuación de Alejandro Talavante y Posada de Maravillas esta tarde en Olivenza: «Está siendo esta temporada una de las mejores de Talavante, en cuanto a variedad, serenidad en su toreo y exquisito temple. Por chiqueros había salido un ejemplar de Núñez del Cuvillo al que lanceó por verónicas, para más tarde quitar por saltilleras. Inició la faena de muleta por medio de estatuarios en el centro del ruedo, rematados con un pase del desdén muy pinturero. Acto seguido se echó la pañosa a la izquierda y comenzó a tirar del toro al natural, de forma muy templada, casi se podría decir que con mimo.Entendió perfectamente a su oponente y le dejaba los tiempos que el animal requería para reponerse del esfuerzo, de tal forma que pudo enjaretar también faena muy templada por el derecho, para acto seguido, por medio de un cambio de mano majestuoso, continuar toreando al natural, exigiendo mucho al de Cuvillo, que terminaría buscando el abrigo de las tablas. Epilogó por medio de manoletinas y tras dos pinchazos sin soltar, la cruz de cada día de Alejandro, dejó media estocada que precisó de un golpe de descabello. También paseó un trofeo».
«Y cerraba cartel el becerrista Posada de Maravillas, alumno de la Escuela de Tauromaquia de Badajoz, torero de estirpe, que maneja el capote como se espera de un Posada, y que aunque con cuentagotas, dada la embestida con la cara a media altura del eral de Píriz que le correspondió, pudo dejar algunas verónicas dignas de recuerdo.Sin embargo donde de verdad ha dejado fases para la memoria ha sido con la muleta, siempre citando desde la distancia que el animal precisaba por su tranco, le echaba los vuelos para embarcar las embestidas con la figura erguida y componiendo mucho el gesto. Faena en la que ha demostrado que le funciona la cabeza, como reza su nombre en los carteles, de maravilla, en este caso en singular. Además, sabe cruzarse al pitón contrario, lo cual le lleva a ligar muy bien los muletazos dados con la lentitud y cadencia necesaria para que salgan desmayados y mayestáticos.El cierre de faena por medio de ayudados por bajo fue digno de ser alabado en esta crónica. Mató de entera e incompresiblemente encontró la dureza presidencial que sólo le concedió una oreja».