El letrado sevillano no dejó a nadie indiferente con su intervención como conferenciante en el Museo del Club Taurino de Badajoz. Claro y divulgativo explicó los resortes que el derecho ofrece a la Tauromaquia como elemento de defensa ante los ataques que ésta sufre.
Antonio Girol.-
Joaquín Moeckel no ha rehuído su compromiso con el Club Taurino Extremeño de Badajoz a pesar de la pintada en contra suya que alguien amparándose en la cobardía que otorga la noche había dejado, junto con otras de idéntico calado, en las paredes de la sede de la entidad pacense.
Sobre este desagradable episodio versó su primera intervención tras ser presentado por Fernando Valbuena. El abogado con sorna se refirió a ella diciendo que de haberle avisado unas horas antes se habría traído los utensilios necesarios para borrarla. En clara referencia al hecho ocurrido hace unos meses en Sevilla, en donde la estatua erigida a Curro Romero frente a la Maestranza fue vilmente pintada de rojo, y ante la pasividad del consistorio sevillano, él mismo junto con un grupo de aficionados limpiaron recibiendo por ello la reprobación del alcalde hispalense que amenazó con demandarle por haber usado materiales inapropiados.
La conferencia de Moeckel se ha centrado, como no podía ser de otro modo, en el campo jurídico aplicado al taurino. Así, el abogado explicó al público asistente que la Tauromaquia debería solicitar el mismo tratamiento que otros espectáculos. Y entre las novedades que propuso de cara a un futuro con mejores perspectivas jurídicas, se refirió a la creación de un Consejo de Asuntos Taurinos además de solicitar a la UNESCO un blindaje a través de la declaración como patrimonio cultural inmaterial.
Volviendo sobre el hilo de los ataques que actualmente sufre la fiesta, argumentó que en estos momentos es hora de pasar de la indignación a la acción. Para ello señaló que no hay mejor fórmula que plantar cara a través del derecho. Ya que los ataques que está sufriendo la Tauromaquia han de enfrentarse jurídicamente.