El verbo fácil y afiligranado de Fernando Naranjo Durán pone epílogo a la XXV Semana Cultural Taurina Pacense haciendo un repaso por las distintas ‘faenas’ que pudieron presenciarse, y escucharse, en el Museo del Club Taurino.
Fernando Naranjo Durán.-
Como suave letanía su rumor se va alejando…. dejó su historia prendida entre alfileres del alma, esta semana rendida a las artes del toreo… Si no lo veo, no lo creo, ¡qué poca gente asistió a la llamada del toro!… ¿Es que no se acartelaron “figuras” de la talla que se esperaban?…
No asistí al acto inaugural de la XXV Semana Taurina Pacense. Fue por delante el maestro Juan Ángel Franco García, que imparte magisterio taurino desde los medios de comunicación, al que le cupo matar el 1º del “encierro” En esta ocasión como brillante telonero de rango y fuste, con su documentada y oportuna exposición de “la fiesta en tiempos revueltos”
Sí pude asistir a la faena ortodoxa de explicación que José Luís Mosquera Müller enjaretó sobre los cosos taurinos de nuestra vieja piel de toro.
Pero fue en el día que hizo tercero cuando apareció por el estrado presidencial todo un caballero de la farándula de las artes escénicas: Miguel Murillo. Autor teatral y persona de verbo fácil y envolvente. Que sin titubeos, al más puro estilo del desaparecido Manuel Dicenta o, “a loPaco Camino”, es decir: dominador, clásico, austero, reondo, y con garbo de finísima figura de las de antes…
El toro entre candilejas
en hermanado universo,
ostenta en sus astas versos
de amor cruel, y dulces quejas
enredado en sus madejas
de lo falso y lo real…
Esperpento emocional
fundido en lo cotidiano,
del griego, y circo romano,
se hizo un sentir nacional!!
La noche como un cuchillo
de poemas sin escusas
rasgara un velo de musas
que acudieron con su brillo,
y al lance Miguel Murillo
en su franela jocunda
hizo defensa profunda
por torera, y por honesta,
por el amor a la fiesta,
fuera redonda y rotunda!…
Al que hizo 4º en esta taurina semana, le tocó lidiarlo, con austera maestría a Gaspar García Moreno, Director General de la Corporación Extremeña de los Medios Audiovisuales, que con destreza desmenuzo parte de todo el organigrama que embaraza a los medios de comunicación y la fiesta. Al que no me atreví a preguntar por la “jarra del vinagre” en donde se pudieran verter los malos humores del aficionado medio a nivel nacional (aunque pudiera haberme asistido mi derecho como contribuyente, y ciudadano libre) Afortunadamente, y a pesar de la que está cayendo fuera, aquí en Extremadura han retoñecido programas dedicados al toro bravo y al caballo de pura raza, por lo que hay que levantarse y aplaudir…
Decía el Guerra que no había 5º malo…Desafiante resoplaba en la arena, el que hiciera ese número para certificar su paso por el extraordinario “corral-salón” de actos de la Real Sociedad General de Económicas de los Amigos del País, en donde tuvimos la suerte de ser atendidos, irrumpieron sobre tablao, un nuevo elenco de artistas del planeta de los toros… Los Veterinarios Antonio Moreno Boiso y Antonio Ruiz, responsables de los fielatos en los corrales de la Malagueta y del Puerto de Santa María, respectivamente. Gentes de mar y toros, rebozados del aroma y celofán de la poesía, que al mando de un moderno sistema audiovisual dieron debido arropo, en ese cariñoso y merecido homenaje al veterano y valiente diestro de Sanlúcar de Barrameda, José Martínez Limeño, que cumpliera su cincuentenario de alternativa el pasado año.
Como si de dos garrochistas se tratara, el malagueño condujo la exposición conferencial , acollarado del gaditano Antonio Ruiz, que hizo las delicias del respetable enfebrecido en la musicalidad de sus versos apoyados en aquello de “pelo-pico-pata” que se enseñorean en las marismas. Y en ese río que no muere en bajo de guía, sino que se hace mar, y en sus azules mareas hizo navegar aquellos viejos y salerosos “juanelos”, objeto de deseo en la mirada diaria al aterciopelado horizonte sanluqueño del homenajeado Pepe Limeño, quizás soñando con su destino hacia la gloria de la torera eternidad que hoy disfruta:
Pero faltaba el 6º…Quizás no fuera el mejor, pero sí el más esperado por los celos despertados. En el paseíllo que hiciera Limeño con su “pata negra” al hombro contrario quedaba prendido en el aire el suspiro de la despedida al equipo de gobierno, en la persona de su presidente Luis Carlos Franco García, que tanto hizo bajo su mandato por este ciclo continuado de charlas y que ahora pretender dar por finiquitado.
SEÑOR GALENO
I
¿A dónde?…amigo y doctor
¿Por qué camino del toro
te has de ir nazareno, y oro,
todo prócer, y señor?
Deseo yo lo mejor.
Tú pisar firme y sereno
como aquel toreo güeno
sin enmendar tú figura
Sea longeva andadura
por siempre…¡Señor galeno!
II
Pero te queda la «suerte»
de zurcir cualquier cornada
envainada o desgarrada
A las puertas de la muerte
de grana y oro, reviertes
en capítulo olvidado…
Sobre este circo sagrado
tú eres ángel vigilante
en nuestra España sangrante
de un viril antepasado
III
Así que inicia despacio
desde calle Montesinos
salir por nuevos caminos
en busca de aquel espacio…
Donde los finos topacios
abrasan bajo este sol
en tardes de si bemol,
amigos de sol y sombras…
Esta pluma que hoy te nombra
te recuerda ¡muy señor!
Fernando Naranjo Durán.