Fernando Naranjo nos relata con su especial prosa bordada en verso su particular visión de la próxima feria de Olivenza, una vez que las marquesinas de la ciudad ya empiezan a poblarse del cartel anunciador de los ajustes de marzo.
Fernando Naranjo Durán.-
Aunque a estas horas tempranas, desde mi ventana se atisbe fresca la mañana un tanto cárdena y desabrida, se palpa en el ambiente la inminente irrupción de la primavera en los campos y dehesas de nuestra Extremadura. Que se acicala para acercarse a la cita de la primera feria taurina importante del calendario nacional en la noble villa de Olivenza: Puerta de la “Janda” ganadera en esta, su sede extremeña. Abrazada al país de “Marialba” y a su extremo sur, vigilada por las torres más hermosas de nuestra región torera…Jerez de los Caballeros, cuna del flamencólogo Pérez de Guzmán, y solar de aquella sangre brava que arribara desde la Janda gaditana, del arrogante Vejer, y la genuina Alcalá de los Gazules, allá por el año 28 del siglo de oro, por deseo expreso de Don Agustín Mendoza, Conde de la Corte…
El pueblo oliventino tan acostumbrado a ejercer de cicerone y maestro de ceremonias taurinas desde siempre, se pone de tiros largos en estas fechas para recibir con los brazos abiertos a tempranera afición, que se da cita puntual entre sus antiguos muros de rancias soleras hispano lusas.
El trato amable y sensual de sus gentes, dueños de una idiosincrasia singular por única, sean las influencias de Dionisio I de Portugal, y nuestro Rey Fernando IV. Quizás de ahí su brava nobleza caballeresca, y su exquisita cortesía…
No podría seguir con mi artículo, no sería lo suficientemente serio sin recordar en estas líneas al que fuera el máximo impulsor, o impulsores, de este fenómeno social en una ciudad, no capital, de esta región extremeña dotada de otras ciudades con mayor número de habitantes, pero claro, menos aficionadas…Difícilmente habría sido posible componer una feria tan taurina y audaz, sin el concurso de Marceliano Ortiz Blasco (Q.E..P) Piedra angular, junto a su inseparable hermano Pablo, aficionados de pro, que al hacerse con la total propiedad del inmueble taurino, dieron su toque más profundo y exquisito, convirtiendo lo en lo que es al día de hoy, todo un Santuario. Para el peregrinar del orbe taurino allende nuestras fronteras, para mayor gloria concedida a sus paisanos, y aquel grupo de amigos que formaron su elenco de aficionadas amistades, en donde tuve el honor de militar…
Tan solo una ganadería local se correrá en esta, en su modalidad de novillada. La prestigiosa vacada de los herederos de Bernardino Piriz Carballo, que tantos triunfos cosechara avalando a figuras de otras épocas, como Luis Reina, Ángel Teruel, o él más longevo de todos, nuestro Faraón de Camas, Curro Romero o Manolo Vázquez, entre otros…
La terna novilleril, estará compuesta por dos alumnos del patronato de la escuela de Badajoz:’El Fini’, al que aún no he tenido la suerte de ver, y por lo tanto, tan solo referencias, y Rafael Cerro, que se presenta con los del castoreño por primera vez, y Dios lo quiera, se convierta en el nuevo logro extremeño por esas rutas de Tauro, para la grandeza de esta tierra que tantos toreros amasa bajo la sabia enseñanza de Antonio Jiménez “Antoñete” y el maestro y matador de toros, figura extremeña hace algunas décadas, Luis Reina. Hijo de la cordial ciudad de Almendralejo, estos bajo la dirección del joven Nandi Masedo, Director de dicho Patronato, y a nivel mundial, de las escuelas de tauromaquia.
Las corridas para esta ocasión, pues bien rematadas, como es la costumbre en este ‘asevillanado’ Coso, y por seguir su línea ‘maestrante’. Muy cuidado su tinte, y entre sus ‘colores’ se encuentra el más bravo torero del escalafón, Antonio Ferrera, figura indiscutible por matar lo más duro lidiado en esta vieja piel de toro, y allende los feudos del gabacho. Y que ya diera la talla en esta Plaza el día de su alternativa con una de Albaserrada, vía Victorino.
El Juli. Hoy ganadero en dicha Janda, figura indiscutible en todo el ámbito no podía faltar para prestar su concurso de primerísimo figura del escalafón del toreo actual…
Otro que hará su presentación, inicio de temporada es el Turronero, “De terciopelo y fuego”, hijo de Manzanares, ¡el Grande!
El Arcángel de la Puebla, (M. A. Perera) tiene su sitio ganado a pulso, por ser el más poderoso torero sobre el suelo patrio. Y el Angelote de la impávida figura, ( A,Talavante) Su zocata de oro fino, navega los cursos de su intermitente Guadiana. Por mor de su acobardada Tizona. Barquero de sus orillas espero verlo navegar avante claro, hacia ese gran mundo que ansioso lo espera… Junto al extremeño de las exquisiteces, Juan Mora, el que hizo despertar a esta amodorrada afición, un buen día allá en las Ventas del Espíritu Santo, cuando con un “tío” con todas sus barbas, se embraguetó en una faena breve, pero intensa y maciza, sin alharacas, de las de antes…Y acariciando el estoque que elegantemente pendiera durante toda la faena, asida por su brazo diestro le recetó una seria y contundente estocada que diera con los lomos del burel en la arena de los madriles, del siete al mando de su gorila el “Rosco”…
De las corridas a lidiar aunque debieran ser anunciadas en mis primeros renglones no haré referencias, yo no soy un cronista al uso. Solo un soñador al que dan permiso, y “asilo político” en este sitio…
No hice mención sobre la puesta apunto para iniciar el paseillo…Nos falta la imprescindible animación, de la banda taurina. Esta de Olivenza cuenta entre las mejores que un servidor haya podido escuchar. Su Agrupación Filarmónica está al nivel de prestigio con la malagueña de Miraflores y Gibraljaire, a las ordenes del Maestro Puyana, que anima en la Malageta, de Luis Segura y don Antonio Ordóñez, bajo la atenta mirada de don Manuel Alcántara, poeta “cenachero” refugiado en su Rincón de la Victoria…O la del maestro Tejera, ahora de su sobrino Tristán, al compás de pausado y rítmico son, hace que se ralentice el toreo hacia lo eterno dentro de los profundos muros de nuestra Real Maestranza de Caballería Sevillana.
Este Coso de Olivenza es el más fiel reflejo del antes mencionado, por parejo sentimiento, en sus educados tendidos, que saben mostrarse en aficionado, por su respetuoso silencio, convertido en un tempo de su armonía más torera, alimentada por duendes de maestrantes veneros…
Si mi amigo Antúnez, (que fuera oficial de ese Ayuntamiento) socio fundador, y colaborador de dicha agrupación sinfónica y torera, viviera, para leer este artículo, no dudo, sonreiría al ver el cariño conque trato a “su” banda, en la que quiso alistarme como socio en su labor más filantrópica…
Aprovecho esta providencial ocasión, y ruego, no hagan sonar el pasodoble ‘Nerva’ por la posible distracción en un momento crucial de una faena bien construida, pero huérfana de comunicación, al ser jaleado el fandango del solo de trompeta, por el público menos entregado, provocando así el malhumor de los duendecillos toreros que vienen de cuando en cuando…Mejor incorporar por ser más sinfónico, ‘Jabugo’ del maestro Abel Moreno, (Encinasola) dedicado al humilde lugar que me vio nacer…
A la Banda cultural Filarmónica
La magia del temple hace partitura
de Olivenza una tarde enamorada…
Y al compás la muleta perfumada
demanda Filarmónica apertura..
Celosas las corcheas con premura
se baten por la nota codiciada,
en busca de cintura muy quebrada
cuando surgen esbozos de pintura,
en faustos aquelarres sobre alberos!
Y un clamor enronquece los tendidos
por arrojos puntuales y toreros
al compás sostenido de un redoble!
Y oles espontáneos y encendidos
Se abrazan al solemne! Pasodoble!